Adriana es tímida, demasiado, y tiene una autoestima no muy alta. Lleva una vida tranquila, algo monótona, lo único que le preocupa es la falta de empleo. Es feliz con su familia y sus amigas. Víctor es independiente, guapo, y un seductor que sabe el impacto que produce en las mujeres. El seductor y ligón cambia cuando Adriana se cuela sin quererlo en su vida y en su cabeza.