Description:«Toda la historia española de la Regencia, desde la muerte del Rey Alfonso XII en 1885, bascula hacia el desastre de 1898. Cuba estaba en el horizonte. Un trágico presentimiento se ahondaba año tras año, crisis tras crisis, en la conciencia nacional española. Pero durante muchos años todo el mundo esperó de Cánovas el milagro. Él había solucionado satisfactoriamente, gracias al patrocinio del papa León XIII, la crisis de las Carolinas, cuando la opinión pública clamaba insensatamente por la guerra contra la Alemania de Bismarck; y solucionaría también la crisis de ultramar. Lo cierto es que Cánovas no se había preocupado del horizonte internacional y su política exterior no tendió a sacar a España de su secular aislamiento, sino que la hundió todavía más en él. Y aunque el Estado de la Restauración hizo un gran esfuerzo de última hora para preparar militarmente a la nación, ni resultó suficiente ni atendió a los aspectos logísticos y sobre todo morales del Ejército de Tierra en Cuba; por su parte, la Marina no se había renovado de cara al futuro, al contrario que ocurrió en los Estados Unidos, cuyas fuerzas navales eran insuperables».