Este libro exige releer a Kafka o al menos a mi me dieron ganas de hacerlo. Me generó otras cosas interesantes y estoy seguro de que a todos aquellos que lo lean también. ¿Pero qué necesidad de escribir un libro sobre Kafka ahora? ¿Por qué en Argentina? Por empezar, Diego Cano ni siquiera lo leyó en alemán. Pero hay claves de lectura en el libro que son una respuesta y muestran que no se trata de un trabajo de erudición sino de una forma de entender la tradición literaria que está hoy en día flotando en el aire. A veces Diego Cano reduce el juego a Strafacce y Aira, y eso me parece forzado o tendencioso, pero este trabajo es una gran muestra de amor a la literatura y yo lo celebro porque es un libro sobre el mejor escritor de todos (sin distinción de géneros) y el comienzo de la literatura que más me gusta. Cuando lo leía me preguntaba: ¿De adonde saca Diego Cano tanta energía? Pero está claro que no es solo energía. Este libro es la oportunidad de hacer algo que hace mucho tiempo no se hace en este país: volver a hablar de literatura como si la literatura fuera lo más importante.