Memphis Ward llega a Quincy, Montana, en el quinto peor día de su vida. Necesita una ducha. Necesita un bocadillo. Necesita un poco de cordura. Porque mudarse al otro lado del país con su bebé recién nacido es, con diferencia, la mayor locura que ha hecho nunca.
Pero tal vez se necesita un poco de locura para construir una buena vida. Si dejar atrás el pasado requiere miles de kilómetros y una nueva ciudad, lo hará si significa un futuro mejor para su hijo. Incluso si requiere dejar de lado el glamour de su vida anterior. Incluso si requiere trabajar como ama de llaves en The Eloise Inn y vivir en un departamento sobre un garaje.
Es allí, en el quinto peor día de su vida, donde conoce al hombre más atractivo que jamás haya visto. Knox Eden es un sueño hermoso y pecaminoso, un chef y su casero temporal. Con su mandíbula afilada y rasposa y sus brazos tatuados, es tosco y rudo y todo lo que ella nunca ha tenido y nunca tendrá. Porque después del primer peor día de su vida, Memphis aprendió que una buena vida también requiere renunciar a sus sueños. Y un hombre como Knox Eden sólo será un sueño.