Como consecuencia a un insospechado accidente y en virtud de las normas constitucionales vigentes, un hombre de color ha sido proclamado presidente de los Estados Unidos de América.
He aquí el tema central de la que constituye con toda seguridad la novela política más apasionante y atrayente de la última década.
El lector se ve introducido en el mismo centro neurálgico de la Casa Blanca donde Douglass Dilman, hasta entonces un senador de raza negra casi desconocido, se convierte de la noche a la mañana en el jefe ejecutivo de la nación más poderosa de la tierra.
El hombre constituye una novela de ágil y profunda tensión dramática en torno a la dura lucha entablada por el presidente Dilman para permanecer fiel a su juramento frente a las graves crisis internacionales, las disensiones internas, la violencia, el escándalo y la feroz hostilidad de sus adversarios.
Una fascinante variedad de personajes aparece en la obra, hombres y mujeres de todo tipo y condición, cada uno de los cuales se enfrenta con una coyuntura personal definitiva y crucial, en tanto sus vidas convergen progresivamente hacia la figura de El hombre, el Presidente Negro.
Al igual que en El premio Nobel —la obra que le dio fama internacional—, Irving Wallace combina de manera apasionante la ficción y la realidad.